Los cuadros tienen la particularidad de resaltar la decoración, marcando un sello personal que refuerza el estilo decorativo y nos habla de las personas que habita el lugar. Bien distribuidos los cuadros aportan valor al concepto general de la decoración, pero una mala elección del tipo cuadro o una errónea disposición en las paredes, provoca un molesto impacto visual alterando la idea decorativa original.
Para aprovechar al máximo los beneficios decorativos de los cuadros es importante conocer ciertas reglas. Las cuestiones básicas a tener en cuenta son:
1-) Qué cuadros colgar ?
2-) Dónde y cómo colgarlos ?